Ya es hora de tomar medidas efectivas para prevenir 13 millones de muertes al año

por Erasmo Carlos Battistella

¿Cuál es el costo de no evitar una muerte cuando es posible?

¿De quién es la responsabilidad de no destinar recursos inmediatos para la inversión en transición energética hacia una matriz más limpia, cuando los organismos internacionales señalan a los combustibles fósiles como los responsables de la mayoría de las emisiones nocivas vinculadas a enfermedades agudas y crónicas?

El Día Mundial de la Salud, que se celebra el 7 de abril, centrará la atención mundial en acciones urgentes y necesarias para mantener sanos a los seres humanos y al planeta y promover un movimiento para crear sociedades centradas en el bienestar. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que más de 13 millones de muertes en todo el mundo cada año se deben a causas ambientales prevenibles.

Durante años he abogado por la aplicación de Políticas Públicas efectivas que garanticen pragmáticamente el cambio necesario para salvar vidas.

¿Cuál es el costo de una muerte? ¿Qué hay de 13 millones de muertes al año que podrían evitarse?

Prácticamente toda la población mundial (99%) respira aire contaminado que excede los límites aprobados internacionalmente, con impactos directos en la salud. Esta es la grave conclusión de científicos y médicos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) presentada este lunes (04/04). La OMS pidió medidas tangibles para reducir el uso de diésel fósil.

Los datos de la agencia indican que 4,2 millones de personas mueren por exposición a la contaminación del aire exterior, además de los 3,8 millones cuyas muertes están vinculadas al humo doméstico producido por estufas y combustibles sucios.

Esta actualización de la base de datos de calidad del aire de la OMS incluye por primera vez mediciones terrestres de dióxido de NO2 y partículas con diámetros iguales o inferiores a 10 micras (PM10) o 2,5 micras (PM2,5). Ambos grupos de contaminantes tienen su origen principalmente en actividades humanas relacionadas con la quema de combustibles fósiles.

La nueva base de datos de calidad del aire es la más extensa hasta ahora en su cobertura de la exposición a la contaminación del aire del suelo, dice la OMS. Alrededor de 2000 ciudades/asentamientos humanos ahora registran datos de monitoreo del suelo para partículas, PM10 y/o PM2.5, que la última actualización. Esto marca un aumento de casi seis veces en los informes desde que se lanzó la base de datos en 2011.

Vientos de cambio

Estos desafíos estarán en la agenda de la 12ª edición de IATA Wings of Change Americas, que se realiza los días 6 y 7 de abril en Santiago de Chile. No hay nada más oportuno que el tema del evento: “Construyendo juntos un futuro sostenible”. Con la presencia de varios CEOs de aerolíneas y líderes del transporte aéreo y del turismo, los participantes debatirán, entre varios temas muy relevantes que involucran al sector, los factores de la sustentabilidad ambiental hasta la próxima generación de vuelos.

El día 6, a las 11:30 am hora local, tendré el honor de participar en el panel Transición Energética de América Latina para Lograr el Cero Neto. Seré el vocero precisamente de la urgencia de las medidas que se deben tomar para revertir definitivamente este contexto ambiental.

La industria de la aviación busca cumplir con las definiciones de CORSIA (Esquema de reducción y compensación de carbono para la aviación internacional). El biocombustible avanzado SPK (Keroseno Parafínico Sintético) desempeñará un papel importante en la búsqueda de estos objetivos de reducción de GEI por parte de la industria de la aviación.

Agencia Europea de Medio Ambiente

Otra advertencia importante vino de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA) el pasado viernes (04/01): el 96% de los residentes urbanos en la Unión Europea (UE) estuvieron expuestos a partículas finas por encima de los límites en 2020. Los datos ponen en evidencia la distancia separando las normas legales de la UE, en su mayoría establecidas alrededor del año 2000, y las últimas pautas de la OMS de 2021 basadas en un examen en profundidad de las pruebas científicas sobre cómo la contaminación del aire daña la salud.

Está claro que tenemos que tomar medidas urgentes, los hechos son bastante claros. El mundo necesita revisar sus lineamientos en la materia, con el objetivo de ajustar los estándares internacionales para anticipar la solución de los desafíos que afectan la salud de toda la población del planeta.

Eso es para ayer!

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